viernes, 24 de octubre de 2014

Apéndice N

Opa rapaces. Se puede ser friki, y se puede decir Apéndice N. Todos a santiguarse cuando se dice Apéndice N. Imagínate una vida sin Apéndice N, bien. Ahora date un puñetazo en la boca y no se te vuelva a ocurrir hacer semejante cosa en tu puñetera vida.

Como dudo que alguien que desconozca el Apéndice N acabe cayendo por aquí, al menos de momento, no lo pienso explicar. Os vais a la wikipedia o a Archiroleros, y allí os proselitizan, os presbiterizan y os prespitecian. 

Tarde de domingueo en Marte, ambientazo ahí

El caso es que dando una vuelta por Pinterest, que es lo único parecido a una red social donde doy vueltas, y donde mi novia por cierto NO se mete cuando no estoy y me trolea los tableros dándole "me gusta" a hombres semidesnudos, fornidos y viriles, en actitud amorosa pero dominante, para que se pueda bromear sobre mi sexualidad; me encontré la siguiente carpeta: Appendix N by Rich Miller 

Vale la pena pararse un rato y deleitarse con semejante exhibición de nalgas turgentes, ataques de simios, ciudades con muchas torres, capiteles y cúpulas, tentáculos, espadas enjoyadas, músculos que ni creías que existían y cielos de colores insospechados, o ignotos, que se diría en el Apéndice N. Bonne matinée.

No hay comentarios:

Publicar un comentario